
Autoridades, activistas, de a pie y
en auto, dirigentes y dirigidos; políticos, sociales, culturales, agripados
y desagrupados.
Toda esta gente enmarcada en un espacio territorial logró levantar su voz y
le está gritando a toda la “INSTITUCIONALIDAD”: Les ORDENAMOS respetar nuestro carácter de CONSTITUYENTE PRIMARIO.
El pueblo es soberano- se lee en
alguna parte- pues bien, ha llegado el momento en el que se confirme. Tiene
derecho un pueblo a decidir sobre su vida o está sujeto ese mismo pueblo a que
se le impongan “intereses nacionales”
sabiendo que tales intereses nacionales no son los verdaderos intereses nacionales, por cuanto otros humanos en otros espacios geográficos de
la misma nación están pensando y actuando exactamente igual; defender el agua.
Ahora, no son las cortes, sino las personas que integran las cortes
quienes se arriesgan a violar la voluntad popular, personas con cargos públicos con sueldos pagados por el pueblo que
se está expresando, estas personas
que integran las cortes decidirán, si quebrantan el interés nacional.
Fusagasugá (Cundinamarca) retoma el
ejemplo de otros espacios como el de su vecino Arbeláez, el de los casipaisanos
de Cajamarca en el Tolima, y otros tantos que a nivel nacional se han
pronunciado en defensa del medio ambiente y de la vida.

¿Será escuchada su voz?
¿Cuáles serán las siguientes
acciones?

Los
Humanos queremos vida.
El
AGUA es Vida, es Paz.