Por requerimiento de
la misma comunidad fusagasugueña, la Secretaría de Gobierno, la policía
Nacional y Oficina de Medio Ambiente, iniciaron los operativos de sellamiento
de establecimientos públicos nocturnos
que no cumplen con las normas para su funcionamiento.
Ésta medida se toma
luego de una previa socialización con los propietarios de dichos
establecimientos, en donde se les indicó el máximo decibel o medida de
sonoridad permitida en cada establecimiento, que no debe superar 60.